Aquaspinning
Practicar alguna actividad en contacto directo con el agua es sin duda
una experiencia envolvente, en la que se logra tener aún más conciencia del
cuerpo y del medio del cual provenimos.
Una de estas actividades es el
aquaspinning. Es una actividad que se desarrolla en la piscina y que consta de
la ejercitación mediante el uso de una bicicleta especial para este medio y a
través de la que se pueden desarrollar una serie de ejercicios que no sólo
potencian la capacidad muscular, sino que también contribuyen en la
rehabilitación sin discriminar edad ni condición física.
El aquaspinning permite conseguir efectos en forma
rápida y efectiva. Con el uso de la bicicleta no sólo se potencian las piernas,
sino que también los brazos, abdomen, zona lumbar y brazos. El trabajo de la
zona lumbar es calificado como "muy importante", generalmente no
trabajamos esa zona con ejercicios dinámicos y hay mucha gente con un déficit
muscular en esa zona.
Además del fortalecimiento muscular, el trabajo
cardiovascular es la base y es muy importante porque tiene el objetivo de disminuir
el porcentaje de grasa y mejorar la capacidad aeróbica.
Por otro lado, gracias a este
tipo de entrenamiento, obtenemos otros beneficios a nivel psicológico y de
wellness, ya que se obtiene una sensación de tranquilidad y satisfacción
personal, la que les permite liberarse en gran parte del estrés, dormir mejor,
sentirse bien, mejorar el metabolismo, entre otros.
El aquaspinning tiene más
ventajas que la versión tradicional o terrestre. Los movimientos de las piernas
ofrecen más resistencias no solo en el empuje del pedal, sino que también en el
movimiento general de toda la pierna. Las clases son un poco más cortas que una
típica rutina de ejercicios en el agua; se trata de treinta minutos en donde
todo está muy bien planificado por etapas, con entrenamientos cardiovasculares específicos,
combinando trabajos medios con trabajos intensos, también hay etapas de
elongación, entre otros.
En cuanto a la manera en cómo
se practica el aquaspinning, se necesita de una piscina y de una bicicleta
especial construida de acero inoxidable y de matrices especiales que permitan
conseguir una buena resistencia. En cuanto a la piscina, ésta debe ser lo
suficientemente profunda para que el borde del manillar inferior de la bicicleta
quede a la altura del borde del agua.
Otra de las características
básicas es contar con un buen instructor, que sepa desarrollar este ejercicio y
mejor aún, que sea certificado profesionalmente en esta dinámica.
LA
POSICIÓN ÓPTIMA EN LA BICICLETA
-Ajuste del asiento en la
bicicleta: Debe estar de acuerdo con las medidas antropométricas de la persona.
El alumno sentado encima de la bicicleta con los pies dentro de los pedales y
con las manos apoyadas en la base del manillar.
- Ajuste de la altura del
sillín. La altura del asiento debe ser tal que cuando el alumno se sienta en la
bicicleta con los pies en los pedales y la pierna se extienda completamente
esta no quede en hiperextensión, podríamos hablar de una extensión de la pierna
del 90%.
Si durante el pedaleo a los alumnos les duele la
pelvis, es posible que el sillín este colocado demasiado alto. Si al pedalear
sentado, los alumnos sacan las rodillas hacia afuera, el asiento puede estar
colocado demasiado bajo.
- Ajuste del manillar en
horizontal: La prueba se hace con el alumno sentado agarrando el manillar en su
base con la posición erguida y codos doblados sin cargar el cuello ni espalda.
• Poner el manillar alineado
en altura con el asiento.
• No inclinar el cuerpo hacia
delante excesivamente para llegar adelante al apoyar las manos, en ese caso
debemos retroceder el manillar.
• Comprobar que pedaleando
con las manos apoyadas en la base del manillar, las rodillas no sobrepasen la
línea del codo.
• Los principiantes y personas con incapacidad para
inclinar el cuerpo hacia delante deberán poner el manubrio lo suficientemente
alto para pedalear de forma correcta.
Por desgracia no es oro todo
lo que reluce. Las instalaciones deportivas se lo piensan mucho antes de
comprar este material.
Hay
diferentes motivos pero a mi me gustaría destacar dos:
- Precio. No puedo decir
el precio exacto de este tipo de bicicletas porque hay de diferentes
marcas, materiales… lo que si se es que no bajan de 1000€. Pero si yo
quiero hacer una clase dirigida necesitare mínimo unas 8 o 10 para que la
gente venga y me salga rentable. Calculando a la baja son 10000€ para un
material que utilizaras una vez por semana (si llega).
- Logística: Que hacemos con las bicis, las dejamos dentro del agua ocupando un espacio que nunca se podrá utilizar para hacer clases o las quitamos y las ponemos del agua cada vez que queramos utilizarlas?? Gran problema no creéis??
Dejaros de bicicletas o cintas acuáticas
y más churros que van baratos (2 euros) y además se pueden hacer infinidad de ejercicios!!
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